Historia del concurso de vinos de La Orotava
Creación del concurso
El Concurso de Vinos Villa de La Orotava nace en junio de 1984 como fruto del esfuerzo y la inquietud por mejorar la calidad de los caldos del Valle de La Orotava de algunos técnicos en agricultura como Antonio Hernández Sánchez y Julián Albertos, máximos impulsores, sin olvidar a Manolo Grillo, Juan Gómez y a José A. Aguado. Siempre con la colaboración y el apoyo del Servicio de extensión Agraria, Cámara Agraria, Caja de Ahorros de Canarias y, por descontado, la Sociedad Liceo de Taoro.
Por aquellos tiempos se pensó en organizar un Concurso de vinos blancos en Los Realejos y otro de vinos tintos en La Orotava.
Periodo 1984-1995
En esta primera etapa participan de media cerca de un centenar de muestras de vinos a granel de los distintos cosecheros-bodegueros del término municipal de La Villa, siempre elaborados con esfuerzo y cariño.
En cuanto a los catadores, éstos eran un grupo de conocidos "bebedores" con cierto prestigio dentro del pueblo, eso sí, apenas conocían las fichas de cata.
Estos años fueron, a pesar de todo, importantes para los viticultores. Se abrió la puerta de la inquietud y el afán por mejorar las distintas técnicas de elaboración, siempre con ánimo de superación.
La comida de confraternidad que se celebraba después del evento, era el núcleo para debatir e intercambiar todo tipo de experiencias y pasar un buen rato entre amigos.
Periodo 1995-2006
La segunda etapa surge como consecuencia del nacimiento de la Denominación de Origen Valle de La Orotava. En este momento los vinos toman un nuevo protagonismo y la semilla de la inquietud sembrada en el año 1984 comienza a dar sus frutos. El Liceo de Taoro sigue apostando por los caldos del Valle. Alcanza acuerdos con el nuevo Consejo Regulador de la Denominación de Origen Valle de La Orotava, y este se hará cargo en lo sucesivo de todos los aspectos técnicos del concurso.
Así pues, en los años 2000-01 ya participan todas las bodegas del municipio, más de una decena. No olvidemos que el Concurso tenía en este momento un ámbito local. Los caldos de la Villa empiezan a tener renombre, ganan premios a nivel nacional e internacional.
A partir de 2007
Una tercera etapa aparece como consecuencia de la desaparición de los comités de cata de los Consejos Reguladores de Canarias, asumiendo todas las funciones técnicas el ICCA (Instituto Canario de Calidad Agroalimentaria), al amparo de la Ley del Vino de 2003. Este hecho hace que el departamento técnico del C. R. Valle de La Orotava se quede reducido al mínimo, no haciéndose cargo de los aspectos técnicos del Concurso.
En el año 2007 el Liceo de Taoro para solventar esta situación nombra un director técnico y le asigna la puesta en marcha y la mejora del evento.
Los resultados llegan pronto, en la edición XXV y XXVI el concurso pasa a ser Oficialmente Reconocido. Se amplía el marco a toda la comarca vitivinícola del Valle de La Orotava primero, y desde la edición de 2009, participan todos los vinos tintos de la Isla de Tenerife. Los Catadores pasan a ser todos oficiales del ICCA, amen de mejorar gran número de pequeños detalles.
Cada año se plantean nuevos retos, teniendo como objetivos principales:
- Ampliar el ámbito a toda Canarias.
- Alcanzar un mayor carácter mediático.
- Involucrar aún más a Bodegas e Instituciones Públicas y Privadas.
Para desarrollar y alcanzar estos objetivos se han diseñado una serie de acciones ligadas a un detallado plan de trabajo.